Una sentimental pieza que tras dos exitosas temporadas en los veranos marplatenses llegó a la sala porteña del Regina.
La actriz protagoniza junto a su esposo Héctor Gióvine la obra del ruso Alexei Abruzov, una sentimental pieza que tras dos exitosas temporadas en los veranos marplatenses llegó a la sala porteña del Regina, un teatro donde la obra tuvo su primera versión local en 1978 bajo el título de “Viejo mundo”.
“Estoy viviendo con mucha felicidad poder cumplir un deseo fuerte de traer esta obra que queremos mucho a Buenos Aires y a un teatro como el Regina que despierta sentimientos profundos nuestros porque allí mismo la estrenaron Rosa Rosen y Carlos Muñoz”, resaltó.
La intérprete recordó que “cuando la vimos con Héctor, la obra nos había parecido maravillosa pero no podíamos encontrarla por ningún lugar, hasta que el hijo de Rosa nos facilitó el original y pudimos hacerla nuestra”.
El texto del dramaturgo ruso Alexei Abruzov (1908-1986) reconoce un aire chejoviano y ha tenido reconocidas versiones en salas del mundo a cargo de grandes duplas como las integradas por Dustin Hoffman-Ann Bancroft, Mónica Vitti-Nino Manfredi, y Alberto Closas-Amparo Rivelles.
Lago-Gióvine, que en el verano de 2014 se reencontraron en escena tras 10 años sin compartir trabajos, asumen brillantemente a dos adultos mayores que se encuentran a partir de sus diferencias y que se atreven a darse una nueva oportunidad.
Ella encarna a la pícara y delirante Lidia Vasil y su esposo dota de humanidad al riguroso médico Raúl Nikol, dos criaturas que pese a sus diferencias y miedos, juegan al amor, pasean sus emociones, disfrutan del lance romántico y asumen una sensualidad que burla las convenciones sociales sobre el culto a la juventud y a la belleza.
“Se han hecho muchas historias de gente grande que se enamora pero esta obra tiene el ingrediente de que se trata de dos solitarios que han vivido amores muy fuertes y con conductas muy marcadas” “Se han hecho muchas historias de gente grande que se enamora pero esta obra tiene el ingrediente de que se trata de dos solitarios que han vivido amores muy fuertes y con conductas muy marcadas: él es alguien hosco y gruñón y ella en una mujer muy alocada”, repasó ella.
Y enseguida arriesgó que pese a que la relación se centra en dos personas de edad “contamos un cuento que también a la gente joven le sirve para emprender la tarea de animarse a armar una pareja y convivir”.
“Milagros del corazón” cuenta con dirección de Manuel González Gil y suma a Martín Bianchedi en la música, Pablo Battaglia en el vestuario y Marcelo Valiente en la escenografía.
Virginia destacó esos aportes porque, sostuvo, “es una obra muy difícil para los técnicos ya que las luces y los sonidos son importantísimos para la trama que encarnamos con Héctor”.
La apuesta de encarar “Milagros del corazón” cuenta con producción de Javier Faroni y llega por ocho semanas a la sala sita en Av. Santa Fe 1235, Capital, porque, resaltó Lago, “en Mar del Plata funcionó muy bien y la gente salió siempre muy conmovida y acariciada”.
“La verdad que es muy bueno en un mundo tan violento, tener la posibilidad de compartir un espectáculo que abriga”, abundó quien sobre tablas asumió a mujeres de la talla de Edith Piaf (“La Piaf”), Violeta Parra (“Violeta viene a nacer”) y Frida Kahlo (“Frida Kahlo, la pasión”), por citar solamente algunos de sus múltiples trabajos.
La puesta de “Milagros del corazón” en el Regina se extenderá por ocho semanas, con funciones de miércoles a viernes a las 20, los sábados a las 21 y los domingos a las 19, de acuerdo a una grilla que, deslizó su protagonista, “puede modificarse, porque si funciona, nos quedamos en Buenos Aires”.
“De todos modos -indicó enseguida- la idea es salir de gira porque yo me considero una itinerante y me gusta ir al encuentro de los espectadores”.
Aunque Lago sigue ocupando las noches de sábado en Telefé como presentadora de la miniserie “Fronteras” desde donde sostiene el espacio de “Historias del corazón”.
Feliz por esa posibilidad porque, confesó, “me permite compartir un espacio con el público”, igual dobló la apuesta y dijo que aspira a llenar ese lugar con ficciones argentinas.
“Voy a seguir insistiéndole a Tomás Yankelevich (director de programación de la emisora) para poder hacer algo tipo ‘Alta comedia’ o ‘Nosotros y los miedos’ en las noches de los sábados”, reveló.