“El alcohol me salvó la vida”, comentó la joven británica tras recibir el alta.
Una joven británica de 24 años creyó que tenía alergia al gin-tonic al notar una hinchazón en la zona de la clavícula tras tomar una copa. Sin embargo, cuando concurrió al médico le diagnosticó un cáncer extraño denominado linfoma de Hodgkin.
Eva Addison habló sobre lo ocurrido con el diario Daily Mail: “Miro hacia atrás, y de una manera el alcohol me salvó la vida. Llevaba sintiéndome mal desde hace tiempo, y cada vez que bebía volvía sentía una hinchazón y mucho dolor”.
Según NHS, el síntoma más común de este cáncer es la inflamación de un ganglio linfático, que suelen estar en las axilas, cuello o ingle. El consumo de alcohol puede provocar intensos dolores, cosa que justifica el malestar de Addison.
Addison se sometió a seis meses de quimioterapia, tiempo en el experimentó un debilitamiento considerado de su cuerpo. “Me sentía muy cansada y con muchos dolores, era incapaz de ponerme en pie. Tenía 23 años y me sentí como una persona de 90”, relató Addison.
La joven percibió el tumor de forma equivocada, creyendo que era síntoma de una simple alergia. Por ello quiere concienciar con su caso la importancia de reconocer los síntomas de una manera inmediata. Addison recibió el alta en septiembre de 2014.