Unos 758 millones de personas mayores de 15 años, dos tercios de los cuales son mujeres, siguen siendo analfabetos en el mundo con una reducción en la brecha de género en los últimos años, una tendencia a la baja que la Argentina viene evidenciando tal como lo revela el censo del 2010, que la ubica en el segundo país con menos cantidad de analfabetos de la región después de Uruguay.
El progreso en la alfabetización “fue notable” en el mundo en los últimos 50 años, y los que más avanzaron fueron los jóvenes, aunque “250 millones chicos de primaria no tienen aún las habilidades básicas que da la alfabetización y 124 millones de niños y adolescentes no reciben ningún tipo de educación”, según el último mensaje emitido hoy por la Unesco.
Esta tendencia al descenso de las tasas de analfabetismo en el mundo va de la mano con lo que ocurre en la Argentina, donde en el período 2001-2010 registró una reducción del índice de 2,6 por ciento a 1,9 por ciento.
En las provincias del NEA, que eran las más perjudicadas por el analfabetismo, consiguieron reducirlo a 2,5 puntos porcentuales promedio.
Chaco bajar su índice del 8 por ciento en 2001 al 5,5 por ciento Corrientes pasó del 6,5 por ciento a 4,3 por ciento; Misiones del 6,2 por ciento a 4,1 por ciento y Formosa del 6 por ciento al 4,1 por ciento.
En tanto, Santiago del Estero descendió su índice de analfabetismo del 6 al 4 por ciento; Salta del 4,7 por ciento al 3,1 por ciento; y Jujuy del 4,7 por ciento al 3,1 por ciento.
En tanto, la ciudad de Buenos Aires registra un promedio de población analfabeta por comuna de 0,49 por ciento y las que presentan tasas superiores al promedio son las de los barrios del sur, que concentran el 60 por ciento de la población analfabeta de la ciudad.
El informe mundial de Unesco destaca que “los jóvenes en África y Asia, por ejemplo, son mucho más propensos a leer y escribir de lo que eran hace 50 años. En 2014, el 91 por ciento de las personas entre 15 y 24 años tenía las habilidades básicas de lectura, en comparación con el 76 por ciento de los mayores de 65 años o más”, informó el Instituto de Estadísticas de Unesco, con motivo de celebrarse el Día Internacional de la Alfabetización.
En el sur de Asia, es más del doble la cantidad de jóvenes con habilidades básicas de alfabetización (84%) que aquellos en el grupo de mayor edad (39%).
Para la Unesco, “también ha habido una reducción constante de la brecha de género en la alfabetización en todo el mundo, las mujeres representan más progresos desde la década de 1960 que los hombres”.
“Las mujeres jóvenes, añade el informe que recoge estadísticas hasta fines de 2015, consiguieron una tasa de alfabetización de 18 puntos porcentuales más alta que la de las mujeres de edad avanzada, en comparación con una diferencia de 11 puntos porcentuales entre los hombres más jóvenes y mayores”.
A pesar de todos estos avances, las mujeres de 15 y 24 años no consiguen superar a sus pares varones en muchos países, “señal clara de los desafíos de género que persisten en el mundo”, sostiene el texto del informe.
En tanto, América Latina tiene aún unos 25 millones de analfabetos de esos 758 millones que se registran a nivel mundial, y los países más afectados son Brasil y México, los más poblados de la región.
Brasil, por su tamaño, reúne la mayor población de analfabetos de América Latina, 14,1 millones de personas, y México midió 7,8 por ciento en 2009, unos seis millones de personas.
No obstante, ambos países lograron reducir el analfabetismo en los últimos años: Brasil cinco puntos porcentuales, lo que implica unos dos millones de personas; y México bajó el índice que tenía en 2005 (8,4 por ciento) y del altísimo 25,8 por ciento de 1970.
La apuesta por incluir las nuevas tecnologías en la alfabetización de jóvenes y adultos es parte de una campaña para educadores con visión global que responde a los desafíos de la educación para el siglo XIX.
En esa sintonía, existe una iniciativa para promover el uso de Wikipedia como herramienta de aprendizaje tanto en ámbitos formales como no formales, así como en la capacitación a docentes.