Uno de los últimos rastros públicos de Leonardo Fariña, ex valijero de Lázaro Báez y también ex marido de Karina Jelinek, fue a mediados de abril, cuando abandonaba el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata tras haber logrado su excarcelación. En ese momento pasaba a manos de la Dirección de Protección de Testigos e Imputados del Ministerio de Justicia nacional. Desde entonces, poco se supo de él. Asados con amigos, mucha introspección, tanto personal como con respecto a la causa que lo llevó a ser noticia. Una vida sencilla, sin estridencias y bastante desconocimiento sobre cuáles eran sus pasos.
Sin embargo, el jueves pasado Fariña fue visto en un lujoso restorán a orillas del Río Luján, en el Delta del Tigre.
Según testigos, ese día, a las 17, el principal arrepentido de la causa de la Ruta del Dinero K, fue visto sentado junto al ventanal con vista al río que tiene “Il novo María del Luján”, en Victorica 611, uno de los restoranes top de la zona, donde se gasta en promedio entre $ 400 y $ 700 por persona.
Mirá también: Los días de Fariña: asados, amigos, terapia y el análisis de la causa
Según pudo confirmar Edgardo, el encargado del local, Fariña estuvo acompañado de dos hombres, donde “tomaron algo, consumieron comida y tras unas dos horas se retiraron del lugar”.
Desde un principio, el Ministerio de Justicia informó que no suministraría ninguna información relativa a las acciones que despliegue la Dirección Nacional de Protección a Testigos e Imputados para garantizar la seguridad de Leonardo Fariña, acogido al régimen antes de declarar como imputado en la causa por lavado de dinero en la causa conocida como la Ruta del dinero K.
Entre las normas que debe seguir un testigo protegido en el país figura, básicamente, que no sea ubicado para evitar que el riesgo se convierta en realidad. Para esto se le impone mantener reserva sobre su condición de protegido, mantenerse dentro de los límites de las medidas de protección, mantenerse alejado de la zona de riesgo, respetar las instrucciones que al efecto se le impartan y no cometer delitos o contravenciones.