El presidente Mauricio Macri pasó un mal momento en su viaje de ayer a Córdoba, cuando descendió del vehículo oficial para saludar a un grupo de personas que lo vivaban a su paso y ser empujado e increpado por una mujer.
Luego del anuncio de inversiones por 500 millones de dólares en la planta que la empresa Fiat posee en Ferreyra, en cercanías de la capital mediterránea, Macri se desplazó en helicóptero a la ciudad de Río Ceballos.
Mientras una camioneta lo trasladaba hacia el Salón Celestina, donde más tarde se desarrollaría el Foro Nacional de Intendentes Radicales, el priopio presidente pidió hacer detener al vehículo para charlar con la gente.
Tras dialogar y sacarse algunas fotos con los vecinos, con apenas una custodia que miraba sin contratiempos la escena, Macri regresó a su auto y fue allí cuando una mujer de unos 70 años se le acercó, lo empujó y le hizo varias recriminaciones en la cara. Todo quedó registrado en las cámaras de los medios que cubrían la actividad oficial.
Si bien los efectivos policiales actuaron raudamente, la situación volvió a poner sobre el tapete la polémica sobre la seguridad presidencial. No es la primera vez que el mandatario se enfrenta a situaciones hostiles de personas que no acuerdan con su gestión de gobierno.
Entre los manifestantes que lo esperaban en Córdoba se encontraba un grupo de damnificados por las inundaciones, que el año pasado dejó ocho muertos y cientos de evacuados. Los afectados reclamaron por la falta de contención y exigieron la puesta en marcha de obras para mejorar la situación.