Ariel Eugenio Llul, guardafaunas fue condenado en diciembre de 2014 por el delito de falsificación documentos públicos para justificar la caza sin autorización de ciervos en Junín de los Andes por tres hechos en junio de 2013.
La sentencia fue ratificada por el Tribunal de Impugnación y de esta forma le impuso una condena de dos años de prisión condicional y cuatro años de inhabilitación absoluta para ejercer empleos públicos.
En ese momento, la teoría del caso que presentaron los representantes del Ministerio Público Fiscal, fue que el 5 de junio de 2013, alrededor de las 18:30, interceptan a Llul en un control vehicular y le encuentran tres ejemplares abatidos y completos de ciervo colorado macho.
También tenía en su poder “tres guías de caza registradas bajo el numerario 00000642, 00000643, y 00002899 extendidas por el referido Cuerpo de Guardafaunas provincial, las cuales fueran previa y parcialmente confeccionadas de puño y letra por el imputado, quien insertara falsamente la rúbrica correspondiente al propietario del área de caza mayor y textos manuscritos, con el objetivo de burlar la actividad fiscalizadora y justificar de esa manera, la caza sin autorización de los ciervos”.
Al parecer, el guardafauna continuó la práctica hasta que fue sentenciado porque las imágenes del video corresponden a marzo de 2014 cuando Llul acompaña al menos a dos cazadores hasta la orilla del lago Falkner en el Parque Nacional Nahuel Huapi. Una vez allí almuerzan truchas, que están prohibidas pescar dentro del parque, y luego matan a un ciervo, tampoco permitido para caza deportiva, además de hacer fuego en un lugar también prohibido.
La indignación por el hecho crece en las redes sociales, sumado a la crudeza del video, donde se ve al animal agonizar hasta morir. Las imágenes que fueron publicadas a través del perfil de Facebook “Guerra Al Furtivo” pueden herir la sensibilidad de algunas personas.