El titular de la CGT oficial, Antonio Caló, advirtió anoche sobre los efectos de la eliminación del cepo cambiario sobre los precios y el poder adquisitivo de lo salarios y aseguró que “con un dólar a $ 14 o $ 15 le están metiendo la mano en el bolsillo a los trabajadores”.
Caló remarcó que si la cotización del dólar alcanza ese parámetro tras el fin del cepo “significa una devaluación del 50%”, por lo que le reclamó al presidente Mauricio Macri que disponga en forma urgente el pago de un suplemento salarial de fin de año de $ 5000 para todos los trabajadores y jubilados destinado a contener el impacto de la suba de precios.
“El presidente Macri ya cumplió con los empresarios. Ahora tiene que cumplir con los trabajadores”, pidió el jefe cegetista y secretario general de la UOM en diálogo con El Cronista. En esa línea, se mostró confiado en una respuesta favorable del mandatario, a quien definió como “una persona inteligente, que va a entender la situación”.
Caló aseguró que durante las últimas semanas se produjo “una estampida de precios” y alertó con nuevos aumentos tras el levantamiento del cepo cambiario, situación que insistió “golpea muy fuerte” sobre los salarios. “Hay productos que aumentaron hasta un 20% estos días, a la gente no le alcanza lo que gana. Tenemos los mismos salarios que negociamos en junio y esos aumentos ya se los comió la inflación”, se quejó el gremialista.
Adelantó entonces que la conducción de la CGT oficial enviará en las próximas horas a Macri un pedido formal de audiencia para solicitarle en forma urgente el pago de un bono navideño de $ 5000 “para todo el mundo, trabajadores y jubilados”. “Ese monto es un piso no un techo, para compensar el desfasaje con los precios y poder pasar las Fiestas en paz”, aclaró el jefe sindical.
La decisión de pedirle al Gobierno el pago de un suplemento generalizado de fin de año fue consensuada el martes en el marco de la primera reunión de la cúpula cegetista luego del recambio presidencial. La creciente inquietud por la aceleración que registraron los precios en las últimas semanas fue el tema central del encuentro, además de la preocupación por el futuro de las paritarias y la pretensión del Gobierno de avanzar en un acuerdo económico y social tripartito.
Al respecto, desde la primera línea de la entidad expusieron su abierto rechazo a cualquier pretensión de que los próximos incrementos salariales se definan en base a la productividad de las empresas; en tanto que deslizaron su temor de que con la propuesta del pacto social solo se busque avanzar con un congelamiento salarial.
Para despejar esas dudas, Caló dijo ayer que la entidad espera reunirse con Macri en los próximos días y hasta confió en que “seguramente el Presidente va a entender las demandas que tienen lo trabajadores”.
